Valdái, Rusia
Museo de las campanas, Valdai
Tours, Atracciones y Cosas que Hacer en Valdái (Valday)
Valdái (Valday) es una ciudad histórica de Rusia localizada entre Moscú y San Petersburgo en la Región de Nóvgorod. Cerca de la ciudad se encuentra el hermoso Lago Valdái, un lago natural del cual deriva el nombre tanto de la ciudad como del famoso foro llamado Club de la Discusión de Valdái.
La primera impresión escrita donde se menciona Valdái fue encontrada en la corteza de un abedul que data del siglo XII, a través de la cual sabemos que, en el siglo IX, lo ciervos de un hombre llamado Yakov y su hijo, Kilm Demekhov, vivían en un pueblo llamado Valdayskoye Selishche.
El aumento de los lazos entre Moscú y Veliky Nóvgorod en la Edad Media impulsó el desarrollo de rutas de transporte terrestre que pasaban por Valdái. Los artesanos a cargo de mantener la logística e infraestructura de esas rutas, comenzaron a establecerse a lo largo de los caminos comúnmente utilizados para el transporte de tracción a caballo. El número de patios en el pueblo de Valdái se multiplicó y se levantó la iglesia de madera Paraskevade que cuenta con un campanario y seis pilares.
En 1703, el Emperador Pedro I fundó San Petersburgo, la nueva capital de Rusia sobre el río Neva. Para desarrollar la ciudad ordenó la construcción de un camino de tierra que conectaba la antigua capital con la nueva. Este camino hizo posible que se incrementase el volumen de comercio, se mejorasen los servicios y se desarrollase la infraestructura a lo largo de la ruta de comercio. Dado a que llevaba varios días atravesar este camino, pronto los hombres de negocios comenzaron a realizar paradas para comer y abastecerse en los esparcidos asentamientos, entre los cuales se encontraba Valdái. Fue en ese entonces que los famosos bagles (rosquillas o panecillos) de Valdái comenzaron a ganar reputación, haciéndose popular entre los embarcaderos del Volga.
El valor comercial y estratégico de Valdái no pasó desapercibido. Con una población de dos mil habitantes, en 1770, por decreto de la Emperatriz Catalina II, fue promovido de su estatus de pueblo a ciudad. Retuvo su nombre a pesar de que había comenzado un nuevo desarrollo. La ciudad contaba con cincuenta herrerías, las cuales atendían a los carros y carruajes que pasaban por allí, a la vez que producían utensilios domésticos para la gente del pueblo y los campesinos de las aldeas cercanas. Se creó un modelo de campana de mano que gradualmente se desarrolló en moldes de campanas en general. Las campanas de Valdái, algunas de las cuales pesan varias toneladas, se hicieron tan populares que incluso fueron nombradas en trabajos literarios.
La construcción de la línea de ferrocarril en 1851 resultó en la reducción del uso de los caminos que pasaban por Valdái, lo cual naturalmente llevó a un declive del comercio. La industria de producción de campanas logró manejar los nuevos desafíos y continuo con la producción a gran escala. Las campanas comenzaron a ser vendidas no solo en Rusia, sino también en los países europeos, donde aún siguen adornando las catedrales. Sin embargo, alrededor de 1927, la producción de campanas cesó.
Valdái ha retenido el encanto de pueblo pequeño, con una población actual de alrededor de 14.000 habitantes. Su historia es aún palpable en sus sitios históricos, tales como la calle Molotkovskaya donde se pueden ver antiguas tiendas de herrería y la calle Gostinopolskaya, conocida por sus puestos comerciales y sus mercados.
Aquellos que visiten Valdái apreciarán la historia preservada en el Museo de la campana de Valdái, el Centro -Museo de la Campana, la Catedral de la Sagrada Trinidad y el Monasterio Iversky. Para disfrutar de experiencias al aire libre, visite el Camino del Gran Valdái y el Parque Nacional Valdái, este último localizado en la hermosa Colina Valdái.