Mausoleo Rukhabad, Samarcanda
El Mausoleo Rukhabad fue construido por orden de Amir Timur y se levanta sobre la tumba del teólogo y místico islámico Sheikh Burhaneddin Sagaradzhi, muy estimado por Timur y sus contemporáneos.
Burhaneddin Sagaradzhi contribuyó significativamente a difundir el islam entre los nómades de Turkestán del Este. Este erudito islámico, quien estaba casado con una princesa china, también fue de gran influencia en la corte de la dinastía Yuan en China. No se ha establecido con precisión la fecha de su muerte, pero se sabe que murió en China. Siguiendo con el testamento que dejó Sagaradzhi, al morir, su hijo Abu Said trajo sus restos a Samarcanda.
Rodeado por un halo de santidad, se dio el apodo Rukhabad – “espíritu residente” a su mausoleo. No siendo muy típico para la época, esta construcción de un domo sin portal de entrada, se construyó de ladrillos y se ve muy modesto en comparación con Gur-Emir y Ak-Saray, localizados en la cercanía.
El arqueado octaedro con ventanas a lo largo de los ejes principales, está sostenido por una base cúbica y coronado por un domo. De acuerdo con la leyenda, el domo cuenta con una caja amurallada que conserva varios pelos de la barba del Profeta Muhammad, los cuales pertenecían al santo jeque.
El mausoleo cuenta con tres entradas, una norte, oeste y sur. La decoración interior del mausoleo es también muy modesta, quizás su principal y casi único ornamento, es un plato de cerámica de dos metros en la pared fundacional con incrustaciones de ladrillos glaseados en forma de una banda angosta. En el mausoleo también se encuentran tumbas simples pertenecientes a Sagaradzhi, su esposa la princesa y sus nueve hijos.