Historia de Georgia
En las laderas sur de las Montañas del Cáucaso, entre el Mar Negro y el Mar Caspio, viven los georgianos amantes de la libertad, que cuentan con una larga y excitante historia. Forjada entre continuos enfrentamientos con poderosos imperios, esta pequeña nación manejó milagrosamente el hecho de no solo permanecer unida, sino también mantener su cultura única, su distintivo lenguaje y aún más importante, su soberanía nacional.
Abundan las teorías acerca de los tempranos capítulos de la historia de Georgia y la etnogénesis de su población. Excavaciones arqueológicas y registros antiguos, han confirmado la presencia de numerosas tribus que habitaron y migraron a través del Sur del Cáucaso desde épocas prehistóricas, y por este motivo, apuntar con precisión cuando y desde donde los ancestros de los modernos georgianos llegaron, es bastante complicado.
Sin embargo, muchos historiadores concuerdan con la idea de que los georgianos son descendientes de los antiguos Colchis, Diauehi y las tribus del Cáucaso Iberiano. Algunas de las más antiguas referencias de esta gente y sus reinados pueden ser encontradas en las crónicas de Heródoto y Estrabón. El reinado georgiano antiguo más famoso era Colchis (Egrisi) el cual, de acuerdo con la mitología griega, era el misterioso hogar de la Princesa Medea, el escenario de la Leyenda del Vellocino de Oro y el último destino de los Argonautas. De hecho, tanto en la mitología como en el mapa mundial, Georgia ha jugado un rol central por mucho tiempo.
El fascinante lenguaje de la nación es una prueba más de la antigüedad e inusual origen de la gente de Georgia. Los continentes de Europa y Asia, entre los cuales se encuentra Georgia, no contienen un solo lenguaje que tenga semejanza al lenguaje georgiano y un análisis lingüístico de Georgia ha confirmado que no pertenece a la familia de ningún lenguaje en el mundo. En su lugar, es una representación única de la familia de la lengua Kartveliana. La familia consiste en 4 lenguajes, los cuales son hablados por georgianos y tres pequeños grupos sub-étnicos: los Megrelianos, Svans y Laz, todos los cuales son nativos de Georgia y la costa del Mar Negro. De acuerdo con algunos lingüistas, la primera división entre los lenguajes proto-Kartvelianos sucedió en el siglo XIX AC. Si esta teoría es cierta, el georgiano es uno de los lenguajes más antiguos hablados en la actualidad.
El lenguaje georgiano tiene tres alfabetos. El más nuevo y utilizado es Mkhedruli, el cual apareció por primera vez en el siglo XI. El alfabeto moderno georgiano consiste en 33 caracteres con hermosas y redondeadas formas.
Geográficamente hablando, Georgia se encuentra localizada en una región estratégicamente importante. El mayor corredor para la gente nómade migrando hacia el sur, solía pasar por la Garganta Dariali, la cual en la actualidad yace a lo largo de la frontera de Georgia y Rusia. De hecho, uno de los principales centros económicos y de comercio de Asia Occidental y Transcaucásica solía estar centralizado en Georgia. Tiflis (Tbilisi), la capital del país, siempre ha sido una ciudad internacional e incluso la regiones remotas del país han alardeado de poblaciones multiétnicas.
Personas de varias etnias han contribuido a los muchos exónimos del país y su lenguaje. Como resultado, Georgia es conocida en la actualidad bajo diferentes nombres. En el mundo del occidente, el país es conocido como Georgia. De acuerdo con algunas teorías, esta palabra deriva de la palabra griega “geo” que significa “tierra” y enfatiza el hecho de que la agricultura se ha desarrollado aquí desde la antigüedad. Los antiguos persas llamaban al país Varkan, que significa “país de lobos”. La designación rusa para Georgia es Gruziya; para los armenios es Vrastan y para los turcos Gurcistan. Los georgianos a menudo se refieren a su tierra como Sakartvelo, que significa “la tierra de la gente de Kartvelia”. Este término fue utilizado por primera vez en la época medieval, de hecho, tiene orígenes bíblicos, con un parecido remarcable con el nombre del nieto de Noé, Kartlos. De acuerdo con la creencia georgiana medieval, Kartlos mismo fue el fundador de la civilización georgiana.
La Biblia y la cristiandad, han influenciado más que en el lenguaje georgiano. El país fue cristianizado en el siglo IV y la religión en Georgia se convirtió en uno de los mayores factores de unificación y parte integral de la cultura local. Georgia es considerado uno de los baluartes clave del mundo cristiano.
Además de su estratégica e importante localización, Georgia siempre se ha distinguido por su clima placentero y su fructífero suelo. Como resultado, por siglos, muchos poderosos imperios buscaron conquistar y dominar el país y la historia de Georgia es esencialmente una larga historia de lucha por la libertad. A través de los años, Georgia ha sido anexado al Imperio Aqueménida y las Legiones Romanas, conquistadores sasánidas de Irán y Arabia, turcos Seljuks y Jorezmitas shahs, kanes mongoles, el Imperio Timúrida, turcos otomanos y Safavid Qizilbash, merodeadores Lezgin y Bolcheviques rusos.
Las armadas enemigas, casi siempre superaban en número a los georgianos y muchas batallas fueron perdidas. Las ciudades fueron derrotadas, capturadas o arrasadas y subsecuentemente vueltas a construir. El derrame de sangre fue inmenso, pero las heridas colectivas siempre pudieron sanar a tiempo para nuevas peleas en nombre de Dios y la libertad.