Religión en Georgia
El país de Georgia es una nación oficialmente secular, que da la bienvenida a los seguidores de todas las principales religiones del mundo a practicar su fe. La religión en Georgia alcanzó su principal punto de inflexión en el año 326 AD, ya que la nación fue reconocida como el segundo país del mundo (luego de Armenia) en adoptar el cristianismo. Actualmente, aproximadamente el 80 % de la población de Georgia se identifica como cristiana, perteneciendo en su mayoría a la Iglesia Georgiana Ortodoxa, la institución religiosa más poderosa e influenciable del país.
El islam cuenta con el segundo mayor número de seguidores en Georgia, más notablemente entre los habitantes de Abjasia y los georgianos de Adjara y otras regiones del sur. Los azerbaiyanos, los cuales habitan principalmente en la región de Kvemo Kartli y la mayoría de la gente kist en la Garganta Pankisi, también se identifican como musulmanes.
Asirios, armenios, griegos y rusos tienen sus propias iglesias ortodoxas en el país, y también hay un pequeño número de católicos. Además, Georgia es hogar de una de las diásporas judías más antiguas del mundo e incluso de comunidades más pequeñas de luteranos y doukhobors, una secta cristiana pacifista de origen ruso.
Iglesia Ortodoxa Cristiana
De acuerdo con los cristianos ortodoxos, en el año 44 AD María, la Madre de Jesús y los apóstoles, echaron a la suerte la elección de sitios donde viajar para predicar la Palabra Santa. La antigua tradición de la iglesia afirma que Iberia (ahora el país de Georgia) fue el primero de los Cuatro Dominios Terrestres asignados a María, quien ahora es celebrada por los cristianos georgianos como la patrona del país.
Las crónicas de la iglesia georgiana afirman que no era posible para María viajar sola a Iberia y, de acuerdo con la voluntad de Dios, permaneció en Jerusalén. Ella pidió al apóstol Andrés que fuese en su lugar. En aquel entonces había dos reinados en donde se encuentra actualmente Georgia: Kartli (Georgia) en el este y Egrisi (Colchis) en el oeste. El apóstol Andrés predicó en ambos, hecho confirmado tanto en las crónicas georgianas como por autores eclesiásticos griegos y latinos. En el pueblo de Atskuri (cerca del actual Akhaltsikhe), las plegarias de Andrés incluso dieron vida a un hombre muerto, un milagro que trajo como resultado las primeras conversiones de la zona al cristianismo. Antes de dejar el pueblo, Andrés dejó una imagen de la Virgen María en una placa de madera, a modo de ícono sobre el cual la gente del pueblo pudiese predicar. Se cree que el ícono de Atskuri de la Madre de Dios, es el primero en su estilo y actualmente se encuentra guardado en el Museo Nacional Georgiano de Tiflis.
Hasta que el cristianismo se convirtió en religión oficial del estado en el 326 AD, los cristianos locales fueron perseguidos por las autoridades durante siglos. El crédito de esta transformación lo tiene Santa Nino, una evangelista supuestamente nacida en la provincia romana de Capadocia. Luego de tener una visión donde la Virgen María le decía que predique el evangelio en Iberia, Santa Nino partió hacia el Cáucaso. De acuerdo con los relatos tradicionales, la joven mujer levantó una gran cruz de madera en la cima de una capilla pagana en las afueras de Mtskheta, la capital de Iberia. Eventos milagrosos que comenzaron a suceder alrededor de la cruz, atrajeron a peregrinos de todo el Cáucaso y actualmente el sitio es ampliamente conocido como la Iglesia de Jvari (cruz). Santa Nino también tiene el crédito de haber convertido al Rey Mirian III de Iberia al cristianismo, pavimentando el camino para que la fe se volviese la religión oficial del estado.
La cristiandad se estableció firmemente en Georgia a finales del siglo IV, sin embargo, en los siglos siguientes Georgia cayó bajo el ataque de los persas, árabes, turcos y mogoles, todos, adheridos a otras religiones. La mayoría de estos invasores intentó forzar a los georgianos a que abandonen sus creencias y muchos fueron martirizados. A pesar de este trágico capítulo de la historia de la iglesia georgiana, con el paso del tiempo, la fe de las personas se mantuvo.
Desde el siglo IX, la iglesia ortodoxa georgiana ha sido gobernada por el patriarca católico. En el siglo XII, en la cima de la Era Dorada Georgiana, el Rey David IV (mejor conocido como David el Constructor), ordenó la construcción del Monasterio y la Academia de Gelati cerca de Kutaisi. En poco tiempo, el instituto se hizo conocido como una de las más grandes escuelas teológicas y científicas del mundo ortodoxo. Asimismo, también servían antiguamente como centros educativos, muchas de las iglesias y monasterios esparcidos en el paisaje de Georgia.
Luego de que Georgia formase parte del Imperio Ruso a comienzos del siglo XIX, la Iglesia Georgiana Ortodoxa perdió su autonomía y fue integrada a la Iglesia Ortodoxa Rusa. En contradicción con la creencia oficial de la iglesia local, incluso el Patriarca Georgiano fue abolido. En el umbral de la Revolución Rusa de 1917, las autoridades georgianas declararon la independencia del país, acto que permitió que la soberanía de la Iglesia Georgiana fuese reestablecida. Durante las siguientes décadas de gobierno soviético, el ateísmo fue activamente promocionado por el gobierno reinante, aunque nunca fue declarado oficialmente como la ideología de estado. La mayoría de las iglesias fueron forzadas a cerrar y muchos curas fueron arrestados. El renacimiento del cristianismo en Georgia llegó solo en los años 1980 con la perestroika.
Desde 1977 hasta la actualidad, la cabeza de la Iglesia Ortodoxa Georgiana ha sido Ilia II (Elías II), arzobispo de Mtskheta y Tiflis. Actualmente el cristianismo en Georgia está en uno de los puntos más fuertes de la historia. El país da ahora la bienvenida a miles de turistas religiosos anualmente, quienes llegan para ver las reliquias albergadas en sus históricas iglesias y museos y para visitar los muchos sitios sagrados alrededor del país.
Judaísmo
El país de Georgia es hogar de una de las diásporas judías más antiguas del mundo. De acuerdo con las crónicas georgianas medievales, los primeros judíos llegaron a Georgia tras la captura de Jerusalén en el 586 AC por Nabucodonosor II, rey de Babilonia y el subsecuente exilio babilonio. A pesar del paso de milenos, la comunidad judía de Georgia ha logrado retener su fe y cultura. Aunque durante la segunda mitad del siglo XX, cuando se hizo posible emigrar de la Unión Soviética, el número decreció drásticamente, la mayoría de aquellos que se quedaron aún residen en Tiflis, la capital de Georgia. Pequeños asentamientos judíos también pueden ser encontrados en Kutaisi, Gori, Surami, Oni, Akhaltsikhe y Batumi. En cada una de estas ciudades es posible encontrar sinagogas activas en su mayoría.
Iglesia Apostólica Armenia
La Iglesia Apostólica Armenia ha estado presente en Georgia desde el siglo V AD, un total de más de 1500 años. En el siglo XI se le concedió el estatus de diócesis en Georgia, con Surb Gevorg (Iglesia de San Jorge) en Tiflis designada como su centro administrativo. En un momento había más de 600 religiones distintivas y sitios culturales asociados con la iglesia armenia en Georgia, incluyendo seminarios y monasterios, pero desafortunadamente muchos de ellos han sido destruidos, ya sea por desastres naturales o vandalismo. La mayor parte de la diáspora armenia que reside en Georgia permanece fuertemente devota a la Iglesia Apostólica Armenia, la cual cuenta actualmente con 32 iglesias activas en el país. Dos de ellas se encuentran en Tiflis y las otras están principalmente localizadas en los asentamientos armenios predominantes de la Región de Kvemo Kartli y los pueblos de Akhalkalaki, Ninotsminda y Tsalka en la Región de Samtskhe-Javakheti.
Iglesia Ortodoxa Rusa
La Iglesia Ortodoxa Rusa llegó a Georgia cuando el país fue absorbido por el Imperio Ruso en 1801. De 1811 a 1917, la Iglesia Ortodoxa Rusa existía como algo más que una extensión de la Iglesia Rusa, ya que esta última ostentaba un estatus dominante.
Los seguidores de la religión ortodoxa rusa en Georgia, inicialmente se trataba casi exclusivamente de empleados del gobierno imperial, personal militar y los miembros de su familia y emigrantes civiles voluntarios de otros territorios del Imperio Ruso. Durante la era soviética, las iglesias rusas sufrieron el mismo destino que los edificios religiosos de cada cualquier fe, algunas fueron destruidas, mientras que muchas otras fueron utilizadas para albergar oficinas públicas, organizaciones seculares, bibliotecas, depósitos, etc.
Actualmente hay tres iglesias ortodoxas rusas en Tiflis y en cada una hay servicios llevados a cabo parcialmente en la lengua rusa. La Catedral Alexander Nevsky, construida en 1864, guarda reliquias de la Santa María Magdalena, Santa Nino, San Nicolás y otros individuos reverenciados. La Iglesia de San Miguel de Tver, nombrada tras el santo patrón del Gran Duque Mikhail Alexandrovich Romanov, fue construida en 1911-1913 y es un brillante ejemplo de la arquitectura tradicional de la iglesia rusa, también conocida por sus deslumbrantes vistas de Tiflis. La Iglesia de San Juan el Teólogo, construida a comienzos del siglo XX, puede reconocerse por sus lavadas paredes blancas y los domos en forma de cebolla que coronan el campanario.
Islam
El Islam llegó a Georgia en el siglo VII cuando la armada de Osman, el Tercer Califa del Islam, invadió Georgia Oriental y estableció el gobierno islámico. Actualmente, los musulmanes conforman el 10 % de la población georgiana y pueden dividirse en dos grupos principales. Los musulmanes sunitas hanafíes de Georgia se concentran a lo largo de la frontera con Turquía en la República Autónoma de Adjara, una región cuya historia como parte del Imperio Otomano llevó naturalmente a diseminar el islam en el área. Los musulmanes chiítas de Ithna Ashariyah son principalmente de la etnia azerbaiyana que residen a lo largo de la frontera con Azerbaiyán y Armenia. La garganta Pankisi es hogar de los kistis, una etnia minoritaria que se adhiere predominantemente a la forma sunita del islam. La más antigua y la única mezquita de Georgia en Tiflis, es la hermosa mezquita Juma del siglo XVIII, localizada en el Casco Antiguo, entre la Fortaleza Narikala y los baños de sulfuro. La segunda mezquita más prominente del país se encuentra en Batumi y varias más pueden ser halladas en la montañosa Adjara.
Catolicismo
La comunidad Católica Georgiana ha existido por siglos, pero nunca ha sido muy grande. Actualmente cuenta con aproximadamente 80.000 personas, el 2 % de la población. La historia del catolicismo en Georgia comenzó en el siglo XIII, doscientos años después del cisma este-oeste entre las dos principales ramas del cristianismo. Dado a que la separación no tuvo un gran impacto en Georgia, donde los reyes ortodoxos eran conocidos por haber dado la bienvenida a representantes del Papa, el catolicismo logró ganar terreno. Los primeros en llegar a Georgia fueron los misioneros franciscanos y pronto fueron seguidos por los dominicos. Como resultado de sus esfuerzos, una sede episcopal latina formal funcionó en Georgia entre los siglos XIII y XVI.
En los años siguientes, la mayor parte de las iglesias católicas en Georgia fueron transferidas a la Iglesia Ortodoxa Georgiana o destruidas durante el gobierno soviético. Actualmente, solo algunas iglesias católicas operan en Georgia, siendo la más notable la Catedral de Nuestra Señora de San Pedro y la Iglesia de San Pablo, ambas en Tiflis, y la Iglesia del Espíritu Santo en Batumi. La hermosa Iglesia de la Sagrada Anunciación en Kutaisi, la cual solía ser una iglesia católica, ahora pertenece a la Iglesia Ortodoxa Georgiana.
Muchas figuras culturales de origen católico han ganado prominencia en Georgia, incluyendo a Zakaria Paliashvili, compositor del himno nacional y fundador de la escuela nacional de compositores; Petre Melikishvili, fundador de la Universidad Estatal de Tiflis; Simon Kaukhchishvili, fundador de la filosofía clásica georgiana; los hermanos Zubalashvili, renombrados hombres de negocios y filántropos y Sulkhan-Saba Orbeliani, uno de los más grandes escritores, eruditos y políticos de la historia de Georgia.
Doukhobors
Los doukhobors, cuyo nombre significa “espíritu luchador”, son tanto un grupo étnico como una religión. Todos los doukhobors se originaron en Rusia y hoy en día la gran mayoría reside en Rusia, el Cáucaso o Canadá. Los doukhobors se refieren a sí mismos como los “ortodoxos cristianos sin mediadores” y no atienden a la iglesia. Ellos creen tanto en la reencarnación como en el Espíritu Santo, no aceptan la cruz y utilizan muchos hechizos y encantamientos. Por esos motivos, siempre han sido vistos como una secta de la Iglesia Ortodoxa Rusa.
En 1839, el Emperador Ruso Nicolas I, le dió a los doukhobors un ultimátum: o se convertían a la religión principal de Rusia o se mudaban permanentemente a la recién conquistada región del Cáucaso. Como resultado, entre 1839-1845, cerca de 5000 doukhobors se asentaron en las regiones georgianas de Javakheti y Dmanisi y establecieron 10 pueblos: Vladimirovka, Tambovka, Rodionovka, Bogdanovka, Spasovka, Orlovka, Gorelovka, Efremovka, Kalmzkovo, y Troitskoe.
Tras la masiva migración de los doukhobors de Georgia en los años 1990, solo el pueblo de Gorelovka permaneció en el mapa. Actualmente el pueblo cuenta con 50 casas y alrededor de 135 habitantes. Es un asentamiento verdaderamente único en Georgia, donde ruso es la lengua natal y la gente utiliza el mismo estilo de vestimenta tradicional de sus ancestros. Los doukhobors son también famosos por mantener viva la tradición folclórica rusa del canto.
Luteranismo
A comienzos del siglo XIX, los luteranos alemanes se convirtieron en los primeros protestantes en instalarse en Georgia, atraídos en parte por las promesas de libertad de religión, la excepción del servicio militar, asistencia financiera y 10 años de excepción de impuestos. En septiembre de 1817, el primer grupo de luteranos inmigrantes conformado por 31 familias suabo-alemanas de Württemberg, llegó a Georgia. Durante los siguientes dos años se establecieron seis colonias significativas en Georgia: Marienfeld, Neu-Tiflis, Alexanderdorf, Petersdorf, Elizabettal y Katarinenfeld. Incluso en la actualidad, la tradicional arquitectura alemana de estas regiones históricas continúa sorprendiendo a los viajeros.
En 1897, la hermosa iglesia luterana San Pedro y San Pablo abrió en los bancos del río Mtkvari en Tiflis. Tras la llegada de los soviéticos al poder, se permitió que la respetada escuela alemana localizada dentro de la iglesia permaneciese abierta durante algunos años; e incluso el hijo de Lavrentiy Beria, cabeza de la policía secreta soviética, estudió allí por un tiempo. Tristemente, la iglesia fue destruida luego de que los luteranos comenzasen a ser perseguidos a comienzos de 1930.
El renacimiento de luteranismo como religión en Georgia está asociado con las actividades de Hert Hummel, un profesor de la Universidad Luterana de Saarbrücken, Alemania, quien se mudó a Georgia a finales de 1980 para conducir actividades misioneras. Hummel eventualmente vendió su casa en Alemania y en 1995 comenzó a construir una nueva iglesia luterana en Georgia. En 1997, exactamente 100 años luego de que la original Iglesia Luterana de Pedro y Pablo fuese fundada, la nueva Iglesia Evangélica Luterana de la Reconciliación abrió en Tiflis. Otras iglesias luteranas en Georgia incluyen la Iglesia Protestante de la Sagrada Trinidad en Batumi y la Iglesia Evangélica Luterana en Rustavi. Una pequeña comunidad de luteranos también vive en el pueblo de Gori.