Mezquita Magoki-Attori, Bujará
La mezquita Magoki-Attori, localizada en el centro de la ciudad, es un ejemplo de una mezquita urbana en un barrio residencial. Ninguno de los monumentos antiguos de la ciudad esconde tantos misterios para arqueólogos e historiadores como éste. Antes de la conquista árabe, existía un bazar donde se intercambiaban ídolos, pócimas medicinales y especias. Además, había un templo de la Luna (Moh), donde más tarde, se construyó una mezquita. La primera parte del nombre de la mezquita "Magok" significa "pozo", porque incluso en ese entonces, ya estaba medio oculta por capas culturales en rápido crecimiento.
Durante las excavaciones en la década de 1940, bajo la dirección del científico V. Shishkin, se descubrió que la primera mezquita se erigió en este sitio en el siglo IX. La mezquita tenía cuatro pilares y estaba decorada con tallas y pinturas. En el año 937, un incendio destruyó la mezquita y en el siglo XII, según el mismo plan, se erigió un nuevo edificio, del cual se conservó un portal con una decoración monocromática única en el sur, pero el edificio se derrumbó en el siglo XV. A juzgar por las inscripciones en el nuevo portal oriental que conduce a una sala semisubterránea, el renacimiento de la mezquita en un lugar iluminado por siglos, se remonta a 1546, pero con dieciséis pilares.
Lo más sorprendente es que la mezquita simplemente podría desaparecer bajo capas de polvo y arena. Durante 800 años, ha estado cubierta por varios metros, y los restauradores tuvieron que excavar todo.
La mezquita Magoki-Attori es una verdadera personificación de la antigüedad. Sus portales son una obra maestra de la decoración arquitectónica: tallas de alabastro, ladrillo pulido, mayólica vidriada y terracota tallada.