Teatro Azerbaiyano
El teatro azerbaiyano encontró una de expresiones más tempranas en un clásico acto de comedia de Navruz, el cual constaba de dos personajes Kos-Kosa y Kechel. A través de bromas se presenta una historia consistente con connotaciones dramáticas, exageradas aún más por los disfraces y máscaras que usaban los actores.
El teatro moderno azerbaiyano comenzó a tomar forma en la segunda parte del siglo XIX. La primera actuación profesional en idioma azerí fue El visir del kanato de Lankaran, escrita por Mirza Fatali Akhundovas y fue presentada en Bakú en la primavera de 1873. El espectáculo fue tan popular que fue seguido por una segunda obra escrita por el mismo dramaturgo, llamada Haji Gara. Siguiendo el suceso de estas tempranas obras, muchos aspirantes a dramaturgos comenzaron a presentar sus trabajos no solo en la capital, sino en los pueblos provinciales tales como Nukha, Ganja, Shamakhi y Nakhchivan.
El repertorio del teatro azerbaiyano consistía en obras locales, así como también clásicos rusos y occidentales. En poco tiempo, el teatro local se había convertido en terreno para nuevas ideas y se utilizaba como plataforma para hablar en contra del fanatismo religioso y la injusticia. Bajo el gobierno ruso también reflejó muchas de las revolucionarias ideas que alcanzaron a Azerbaiyán desde el norte.
Mientras la nación estaba bajo el gobierno soviético, se nacionalizaron todos los teatros azerbaiyanos y las obras fueron colocadas bajo estricta censura. Tras el colapso de la Unión Soviética, el teatro local tomó una postura más abierta a nuevas ideas. En 1989, Vagif Ibrahimoglu creó el Teatro YUĞ, un espacio experimental con enfoques revolucionarios, incluyendo la deconstrucción del libreto, estilos de actuación psicoanalíticos, la negación del drama aristotélico y las formas lógicas y el uso de estéticas extraídas del sufismo. Pronto, otros grupos experimentales siguieron un curso similar. En la actualidad, hay 27 teatros estatales en Azerbaiyán, incluyendo 11 teatros de drama, el Teatro estatal de Marionetas y el Teatro de Pantomima y Marionetas. También hay una creciente industria de teatros privados que no se encuentran financiados por el gobierno, los cuales continúan buscado nuevas formas de expresión mientras permanecen financieramente independientes. Cada año, el 10 de marzo se celebra al teatro de Azerbaiyán en toda la nación en el Día del Teatro.