Uvas Georgianas

De acuerdo con los productores de vino de Kajetia, la capital georgiana del vino, hay más de 500 tipos de uvas cultivadas en Georgia.

Especialistas y expertos concuerdan en que es bastante difícil rastrear los orígenes de muchos tipos de cepas; particularmente tras las epidemias de filoxera que azotaron Europa y el Cáucaso durante el siglo XIX. Luego de haber llegado de américa en cepas de Isabella, la peste exterminó más de la mitad de los viñedos de la región. Las tierras contaminadas fueron quemadas hasta sus cimientos y tratadas con químicos, aunque algunas de las cepas fueron salvadas, cruzándolas con cepas de América. Muchas uvas fueron salvadas de esa forma, pero la calidad del sabor del vino había cambiado para siempre.

Por otro lado, las dos guerras mundiales que siguieron trajeron inmenso daño, así como las repetidas plagas de insectos de los años 1970-1980. Para empeorar la situación, Georgia y los países de la antigua Unión Soviética, sufrieron la misma cantidad de daño por epidemias que por las decisiones imprudentes de los comunistas. En un esfuerzo por combatir el esparcimiento del alcoholismo, en 1985 los soviéticos talaron miles y miles de hectáreas de viñedos, forzando el cerramiento de muchas bodegas. Tan severas fueron las medidas, que muchos vitivinícolas se suicidaron.

Incluso tras el colapso de la Unión Soviética fue difícil recuperar la pérdida, aunque algunas especies georgianas fueron eventualmente recuperadas gracias a la colaboración de colegas vitivinícolas de Uzbekistán y otros países vecinos.

En la actualidad, en Georgia, se cultivan tanto las uvas populares como las raras, conocidas solo por expertos. Para asegurar la calidad del sabor de cada tipo de vino en general y el de Kajetia en particular, lo más importante es el sitio de crecimiento o microzona.

Una lista completa de todos los vinos producidos de uvas georgianas sería muy larga, asique solo mencionaremos los más populares.

Variedades de uvas georgianas utilizadas para producir vino tinto:

La palabra "Saperavi" significa "coloreada" y es por mucho la uva morada más utilizada en los vinos georgianos. Aunque a veces se combina con otras variedades de uva, Saperavi es identificada como una variedad singular de uva tinta seca usada comúnmente para dar color. Esta uva es un elemento básico en la elaboración de vino tinto georgiano.

Tavkveri es una uva tinta conocida por su flexibilidad. Se utiliza para producir vinos que van desde los tintos secos hasta los espumantes.

Las uvas Mujuretuli se utilizan cominadas con uvas Alexandrouli para producir los deliciosos vinos Kvanchkara de la región de Racha.

Las uvas Usakhelouri son nativas del oeste de Georgia. Las bayas con forma orbital oscura maduran tarde y son apreciadas por su carácter "picante".

Las uvas Chkhaveri se cultivan a lo largo de las zonas costeras del Mar Negro de Adjara y Guria para producir una variedad de vinos rosados, incluyendo las espumantes.

Las uvas Ojaleshi son oriundas de la región de Semegrelo. Las bayas de color rubí producen vinos semidulces/dulces con aromas de frutas rojas y matices especiados.

Las uvas Shavkapito son autóctonas de la región de Kartli. Estas uvas producen vinos tintos profundos, robustos y con cuerpo.

Variedades de uvas georgianas utilizadas para producir vino blanco:

Las uvas Rkhatsiteli son la variedad blanca más predominante en Georgia y a veces se utilizan para producir vino ámbar. Cultivadas en la región oriental de Kajetia, los sommeliers (sumilleres) comúnmente notan ciertos toques de cítricos y manzana en los vinos Rkhatsiteli.

Las uvas Mtsvane Kakhuri se denominan así porque producen vinos de un tono verdoso. Se cultivan en toda Georgia.

Las uvas Kisi son nativas de Kajetia. Esta variedad de uva se destaca por producir vinos más finos.

Las uvas Tsolikouri son una antigua variedad nativa de Colchis (actual Imeretia). Estas uvas son la variedad blanca más popular del oeste de Georgia.

Cada uno de estos tipos de cepas, difiere no solo en su sabor, sino en el tamaño de su cosecha: algunas cepas producen 100 toneladas por hectárea, mientras que otras, tienen un rendimiento de no más de tres toneladas por hectárea. Cualquier intento de incrementar la productividad de esos tipos, afectará las cualidades gustativas del vino, llevando a los conocedores a apreciar raros vinos de Kajetia como Kisi", "Chinuri" y "Tavkveri".