Platos Kirguises con Carne y Productos con Vísceras

Platos Kirguises con Carne y Productos con Vísceras

Los platos kirguises con carne y productos con vísceras fueron el principal sustento de los pastores nómades kirguises por siglos. A pesar de que Kirguistán es el hogar de varios lagos y reservas, la cocina kirguisa carece de pescado, y los platos con pollo son casi inexistentes. En cambio, los platos tradicionales siempre incluyen carne roja, hígado y otros órganos de las ovejas, caballos y ganado.

Beshbarmak es un plato kirguiz tradicional que consiste en carne hervida de res o caballo, caldo, cebollas y fideos de masa casera. Para preparar beshbarmak, usualmente se utiliza cordero, pero si hay varios invitados se prepara con una vaca o caballo. A veces las vísceras se cocinan junto a la carne, la cual tradicionalmente es preparada por los hombres, mientras que las mujeres cocinan la masa. Si un hombre no sabe cortar la carne para hacer beshbarmak se dice: “Atasy uirekten emes da” que se traduce a “su padre no le enseñó”. Es costumbre comer beshbarmak con las manos, ya que su nombre significa cinco dedos. Se cree que el mejor beshbarmak se prepara en la ciudad de Talas. En 2018, en Bishkek, se preparó el beshbarmak más grande del mundo; el cual pesaba 1464 kilogramos y entró al libro Guinness de Récords.

Pilaf es un plato tradicionalmente uzbeco hecho con arroz, carne, cebollas, zanahorias, ajo y especias. También se puede agregar garbanzos y pasas de uva.

Chuchuk es una salchicha casera de carne de caballo. Para prepararla se utiliza una pieza entera de carne grasa de las costillas del caballo. Se le agrega sal y se usa de relleno en un intestino para dejarlo reposar en un lugar oscuro y seco. La salchicha se debe hervir al día siguiente a fuego bajo por 1.5-2 horas. Al mismo tiempo que en 2018, se preparó el beshbarmak más grande en Bishkek, se cocinó un chuchuk de 117 metros que también entro al libro Guinness de Récords.

Kuurdak es un popular plato con carne hecho de cordero asado, res o hígado, con cebollas. A este plato, se suelen agregar papas y especias.

Hot-top es un estofado de carne o hígado con papas y otros vegetales. Este plato sabe mejor cuando se cocina sobre fuego y es servido en una olla caliente con fideos o masa hervida.

Byzhy es una salchicha hecha de intestinos de cordero. Se mezcla un arroz parcialmente cocido con el hígado crudo, carne picada, sangre, arroz, harina, grasa y especias. Luego se usa la mezcla de relleno para el intestino, con un poco de espacio libre para que la tripa no reviente cuando el arroz se hinche. Se hierve el byzhy aproximadamente por una hora, y si aparecen burbujas en la salchicha deben ser reventadas con una aguja. Gracias a sus ingredientes inusuales, bizhy tiene un sabor muy original.

Tash-kordo es cordero marinado cocinado en un horno sobre montículos especiales, y es considerado un manjar.

Kerchoo es falda de cordero con grasa que se corta en pedazos y se le agrega sal para cocinarla al carbón. Se cree que los kirguises preparaban este tipo de shish kebab desde hace siglos. Cuando el kerchoo se prepara en casa se le pueden agregar tomates y vegetales cortados.

Olobo es un plato hecho de pulmones (usualmente de cordero) que son cocidos en leche. La parte interna de los pulmones se limpia con agua y antes de hervirlo en leche, se le agregan especias.

Zhorgom son intestinos de cordero, lavados y trenzados de una manera especial y hervidos en agua por 1-1.5 horas.

Zhaa boyrok es un plato único de sabor delicado. Se utiliza la carcasa de un cordero joven al escabeche y al vapor.

Dymdama (también llamado dymlyama o dimlama) significa “guisado” en kirguís. Es un guiso con repollo, papas, zanahorias, berenjenas, pimientos, cebollas y hierbas que se prepara en una olla tapada a fuego bajo. Antes de servirlo debe ser mezclado.

Shishkebek es un shish kebab tradicional de la cocina kirguisa hecho de hígado de cordero o res y servido con vinagre, cebollas y ensalada.

Las croquetas Ala-too son uno de los productos de carne y vísceras kirguises que sólo entró en la cocina local en el siglo XX. Se vierte aceite verde en las claras hervidas, que después se usan de relleno para las croquetas que han sido empanadas y fritas a fuego bajo.